• Con esta www quiero aportar las recetas antiguas realizadas por nuestros mayores, a mi estilo. Las mias propias y la de la gente que ha querido colaborar en la misma




  • La frase que antecede a estas líneas es la única aportación de José Miguel Occhi Ortega, alias Pippo in cucina, a la portada de esta web y se presenta tal y cómo podría ser contemplada por sus visitantes si no hubiera nada más.

    Así queda perfectamente patente cual es el trabajo y la contribución de cada cual.


    Pippo, parece que quiso que esta frase fuera la presentación de la web y para ello la copió de otra suya situada en la parte no visible y destinada a cumplir otras funciones.

    Resulta rancia y desangelada, con lugares comunes que han sido repetidos en el pasado hasta la saciedad, con errores gramaticales y faltas de ortografía y de puntuación. Es como convocar al mundo entero a una fiesta de presentación y personarse con un traje gastado y con lamparones.


    El creador de la web, diseñó la estructura básica (sin ella no se podría ver ni la frasecita de marras) y distribuyó sus espacios: cabecera, cuerpo y pie, todo programado en html5.

    En cada uno situó la información correspondiente: menús de acceso a cada receta por orden alfabético y por categorías y otra información complementaria y el copyright y las entradas a las redes sociales, contacto..., con sus correspondientes enlaces mediante Javascript.

    Eligió los diferentes colores de fondo y la tipografía: tipo de fuente, tamaño, color y líneas de división de los espacios usando CSS3.

    Creó el logo totalmente nuevo y por lo tanto original y lo adaptó al lugar que iba a ocupar. Editó e insertó la imagen de la cocina valenciana con el texto que la ilustra.


    ··············


    Pippo viene utilizando, hasta el momento, la obra y el trabajo del creador con descaro e impunidad, puesto que no cuenta con ningún tipo de autorización para ello, más al contrario, ha sido requerido en numerosas ocasiones para que cese en su acción, haciendo caso omiso y persistiendo obstinadamente en el expolio.

    Tampoco ha manifestado en ningún momento que lo aquí expresado sea incierto ni ha aportado ninguna prueba de ello por lo que habría que deducir que asume el conocimiento y la responsabilidad de todos sus actos.

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